»19 »Después de mucho tiempo, el amo regresó de su viaje y los llamó para que rindieran cuentas de cómo habían usado su dinero. 20 El siervo al cual le había confiado las cinco bolsas de plata se presentó con cinco más y dijo: “Amo, usted me dio cinco bolsas de plata para invertir, y he ganado cinco más”. Mateo 25:19 - 21, NTV.
Escuche esta frase: “Amo, usted me dio cinco bolsas de plata para invertir, y he ganado cinco más”. Los siervos fieles son diligente y estratégicos para poner a producir los talentos que reciben. La multiplicación es el síndrome del Reino de los Cielos. Dios nos llamó a multiplicarnos desde el mismo comienzo de la creación cuando nos formó. Él le dijo al hombre y a la mujer: “reprodúzcanse, multiplíquense, llenen la tierra y enseñoréense de ella”. En ese versículo de Génesis 1:28 encontramos las cuatro características de la conquista, el ensanchamiento y la extensión del Reino de nuestro Padre celestial.
Todo lo que Dios pone en nuestras manos tiene una finalidad: Multiplicarlo. Somos llamados a hacerlo porque sencillamente Él no pierde el tiempo poniendo en manos de alguien recursos sin que primero haya puesto habilidades para hacerlo crecer. Dios vendrá a pedirnos que le rindamos cuenta con lo que nos ha entregado. Así como el Hacendado de la parábola de los talentos que apareció para saber qué había pasado con su dinero, nuestro Padre celestial vendrá a solicitarnos rendición de cuentas con aquello que nos demandó hacer y tal vez no lo estemos haciendo como debe ser. Comencemos por valorar lo que Él nos ha regalado como recursos y pongámoslo a trabajar para que se multipliquen.
T.A.S.C.D.
Lucas 23
Toma un cuaderno y responde las siguientes preguntas inductivas:
¿Quién es Dios en el pasaje que escogiste?
¿Qué te enseña acerca de Él o de ti?
¿Qué pecado te muestra que debes confesar?
¿Qué actitud te muestra que debes corregir o mantener?
¿Qué mandato o precepto debes obedecer?
¿Qué promesa debes reclamar y por qué?
¿Qué ejemplo debes seguir, o por el contrario, debes evitar?
¿Qué te dijo Dios. Cómo escuchaste Su voz en este pasaje?
¿Cómo responderás a Dios por lo que te habló hoy?
Recuerda leer el capítulo y escoger la porción de la Escritura en donde meditarás
Lucas 23
Toma un cuaderno y responde las siguientes preguntas inductivas:
¿Quién es Dios en el pasaje que escogiste?
¿Qué te enseña acerca de Él o de ti?
¿Qué pecado te muestra que debes confesar?
¿Qué actitud te muestra que debes corregir o mantener?
¿Qué mandato o precepto debes obedecer?
¿Qué promesa debes reclamar y por qué?
¿Qué ejemplo debes seguir, o por el contrario, debes evitar?
¿Qué te dijo Dios. Cómo escuchaste Su voz en este pasaje?
¿Cómo responderás a Dios por lo que te habló hoy?
Recuerda leer el capítulo y escoger la porción de la Escritura en donde meditarás