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domingo, 23 de mayo de 2021

LA FE DE ABEL, ENOC Y NOÉ - MAYO 23






“Sin fe es imposible que Dios se agrade”. Hebreos 11:6


Causa curiosidad que los nombres que menciona el autor de la carta a los Hebreos como personajes que agradaron a Dios antes de la ley fueron cinco: Abel, Enoc, Noé, Abraham y Moisés. Pero hay que tener en cuenta que el último vivió los dos períodos, el de la gracia de Dios antes de emitir por medio de él los mandamientos y la ley que regiría el pacto con Su pueblo. Veamos a cada uno de ellos como ejemplo o modelo de hombres de fe: Abel: ¿En qué consistió la fe del segundo hijo de Adán y Eva? En su ofrenda especial. Nadie la había enseñado cómo ofrendarle a Dios, sin embargo él decidió seleccionar lo primero, lo mejor y lo más gordo para el Dios no conocido por él. Dice Hebreos 11:4, “Por la fe, Abel ofreció a Dios un sacrificio más aceptable que el de Caín…” A Dios lo sorprendemos cuando nuestra ofrenda supera lo que Él mismo nos demandaría. Eso es fe atrevida. Enoc: Es poco lo que de este personaje se dice al comienzo de la Biblia, solo trasmite que por cuanto agradó a Dios no vio muerte, porque Dios lo traspuso. La certeza de quien es Dios fue lo que hizo que Enoc fuese arrebatado de esta tierra.

Noé: Su fe lo llevó a obedecer construyendo un arca de salvación para él y su familia, creyendo que Dios le había hablado y mostrado un plan para arrasar con le gente pecadora de su época, por causa de la gran maldad que había en el mundo en ese tiempo. En una época en donde la lluvia no la conocían, este varón trabajó por cerca de 120 años en una embarcación que finalmente les daría salvación, a pesar de la burla que sufriría por construir esta embarcación él se mantuvo creyendo que estaba haciendo lo que Dios le había ordenado hacer.




T.A.S.C.D.

2 Crónicas 35/36



Toma un cuaderno y responde las siguientes preguntas inductivas:

¿Quién es Dios en el pasaje que escogiste?

¿Qué te enseña acerca de Él o de ti?

¿Qué pecado te muestra que debes confesar?

¿Qué actitud te muestra que debes corregir o mantener?

¿Qué mandato o precepto debes obedecer?

¿Qué promesa debes reclamar y por qué?

¿Qué ejemplo debes seguir, o por el contrario, debes evitar?

¿Qué te dijo Dios. Cómo escuchaste Su voz en este pasaje?

¿Cómo responderás a Dios por lo que te habló hoy?

Recuerda leer el capítulo y escoger la porción de la Escritura en donde meditarás