RAZONES PARA UN SACERDOCIO SUPERIOR - ABRIL 1

26 Jesús es la clase de sumo sacerdote que necesitamos. Es santo y no ha hecho nada malo. Es puro y no se deja influenciar por los pecadores. Ha sido elevado a los cielos y 27 no es como cualquier otro sacerdote. Los otros sacerdotes tenían que ofrecer sacrificios todos los días, primero por sus propios pecados y luego por los pecados del pueblo. Pero Jesús no necesita hacer eso, él ofreció un solo sacrificio una sola vez y para siempre. Hebreos 5:26 - 27. PDT.

Vamos a entrar en el tema central de toda la Epístola a los Hebreos, el Sumo Sacerdocio de Cristo. Todo lo expuesto en los capítulos anteriores y hasta llegar al capítulo 4:15, tiene como finalidad llevarnos a la cúspide del lo que el autor de Hebreos quiere tratar: La superioridad del Sacerdocio de Cristo sobre el de Aarón.

Recordemos como comienza esta carta en sus primeros tres versículos: “1En el pasado, Dios habló a nuestros antepasados por medio de los profetas, en muchas maneras, parciales y variadas. 2 En estos últimos días, Dios nos ha hablado de nuevo a través de su Hijo. Él creó todo el universo por medio de su Hijo, a quien nombró heredero de todo lo que existe. 3 El Hijo muestra la brillante grandeza de Dios; es la imagen perfecta de todo lo que Dios es y sostiene todo el universo por medio de su poderosa palabra. Después de haber hecho purificación de pecados, se sentó a la derecha del trono majestuoso de Dios en el cielo”. Hebreos 1:1 - 3. PDT. ¿Qué sacerdote antes de Cristo se había sentado en el trono majestuoso de Dios en el cielo después de haber purificado al pueblo por sus pecados? ¡Ninguno! Porque eran débiles, porque debía purificarse primero ellos mismos antes de presentar sacrificio por el pueblo para que Dios les perdonara por un año sus pecados. Sólo Cristo puedo presentarse delante del Padre como Cordero y Sumo Sacerdote por una sola vez y para siempre a fin de salvar a los que se habían perdido. Esto es el sello de su superioridad frente al Sacerdocio de Aarón.

T.A.S.C.D.

Proverbios 13; 1 Crónicas 13


Toma un cuaderno y responde las siguientes preguntas inductivas:

¿Quién es Dios en el pasaje que escogiste?

¿Qué te enseña acerca de Él o de ti?

¿Qué pecado te muestra que debes confesar?

¿Qué actitud te muestra que debes corregir o mantener?

¿Qué mandato o precepto debes obedecer?

¿Qué promesa debes reclamar y por qué?

¿Qué ejemplo debes seguir, o por el contrario, debes evitar?

¿Qué te dijo Dios. Cómo escuchaste Su voz en este pasaje?

¿Cómo responderás a Dios por lo que te habló hoy?

Recuerda leer el capítulo y escoger la porción de la Escritura en donde meditarás