3 Porque de tanto mayor gloria que Moisés es estimado digno éste, cuanto tiene mayor honra que la casa el que la hizo. Hebreos 3:3, RV60.
Hay varios aspecto de la persona de Cristo que no estuvieron en Moisés cuando recibió la Ley y la enseñó al pueblo de Dios; ejemplo, Moisés no fue Sumo Sacerdote, no fue Apóstol, Construyó el tabernáculo según el diseño que Dios le mostró, pero no fue el Tabernáculo; presentó al pueblo el pacto de Dios, pero no fue con su sangre que se instituyó esa alianza sino con la sangre de corderos y becerros que fue derramada sobre aquellas tablas.
La primera diferencia superior que el autor a los Hebreos hace comparando los ministerios de Moisés y de Jesús es el Apostolado y el Sumo Sacerdocio de Cristo. Títulos que nunca fueron otorgados al libertador de Israel. El escritor de esta carta quiere destacar la superioridad de Cristo en su condición de Hijo de Dios quien es el verdadero constructor de la casa, haciendo referencia al tabernáculo levantado por Moisés en el desierto que simbolizó la presencia de Dios en medio de Su pueblo como un compromiso Suyo que hace parte del pacto con Abraham y con Israel (Yo estaré contigo). Moisés erigió una casa de Dios, pero Cristo es la verdadera Casa de Dios, que ahora es levantada en la vida de cada hombre y mujer que lo reciben como Su Señor y Salvador. Por eso Hebreos recalca que no puede tener más gloria quien construye a Su diseñador, que en este caso es el mismo Jesús, quien es morada eterna de Dios. En pocas palabras, Jesús es superior a Moisés por tres razones: Es fiel apóstol sobre Su casa (enviado de Dios), es fiel Sumo Sacerdote de la casa (Ofreció ofrenda única a Su Padre por el pecado de la humanidad) y es el fiel Arquitecto Diseñador de Su casa, siendo superior a quien la construye. Finalmente, el énfasis del autor es mostrar la superioridad de Cristo sobre Moisés porque el primero es Creador y el segundo es creado por el primero. Eso le da mayor gloria al Hijo de Dios.
T.A.S.C.D.
Marzo 18
2 Reyes 23 - 24
Toma un cuaderno y responde las siguientes preguntas inductivas:
¿Quién es Dios en el pasaje que escogiste?
¿Qué te enseña acerca de Él o de ti?
¿Qué pecado te muestra que debes confesar?
¿Qué actitud te muestra que debes corregir o mantener?
¿Qué mandato o precepto debes obedecer?
¿Qué promesa debes reclamar y por qué?
¿Qué ejemplo debes seguir, o por el contrario, debes evitar?
¿Qué te dijo Dios. Cómo escuchaste Su voz en este pasaje?
¿Cómo responderás a Dios por lo que te habló hoy?
Recuerda leer el capítulo y escoger la porción de la Escritura en donde meditarás
Marzo 18
2 Reyes 23 - 24
Toma un cuaderno y responde las siguientes preguntas inductivas:
¿Quién es Dios en el pasaje que escogiste?
¿Qué te enseña acerca de Él o de ti?
¿Qué pecado te muestra que debes confesar?
¿Qué actitud te muestra que debes corregir o mantener?
¿Qué mandato o precepto debes obedecer?
¿Qué promesa debes reclamar y por qué?
¿Qué ejemplo debes seguir, o por el contrario, debes evitar?
¿Qué te dijo Dios. Cómo escuchaste Su voz en este pasaje?
¿Cómo responderás a Dios por lo que te habló hoy?
Recuerda leer el capítulo y escoger la porción de la Escritura en donde meditarás