Pero yo os digo que el que repudia a su mujer, a no ser por causa de fornicación, hace que ella adultere; y el que se casa con la repudiada, comete adulterio. Mateo 5:31.
El sentido de protección hacía la mujer, que era de poco valor en medio de la cultura judía, aun desde los tiempos de Moisés. De ahí que la única causa que Jesús establece para que una mujer sea repudiada por su marido es que ella cometa adulterio. Recordemos que la ley Mosaica autorizaba lapidar a quienes se encontrara en este tipo de pecado, fuera hombre o mujer, o los dos sorprendidos. Jesús aclara la causa porque en esos días los hombres despedían a sus mujeres por razones de poco peso y valor. Simplemente querían cambiar de mujer y la repudiaban, pero no les daban carta de divorcio.
Lo novedoso que el Señor amplía con respecto a lo que la ley expresaba en cuanto a la razón para autorizar el divorcio, es la razón única: haber sido sorprendida en adulterio. Si así ocurría su marido la despedía, pero le otorgaba nuevamente libertad para casarse. Así ella quedaba limpia delante de la sociedad y de la cultura. En eso Jesús estaba estableciendo una justicia mayor en las relaciones matrimoniales.
Leer: Hebreos 9
Lectura complementaria: Hebreos 10
Para pensar:
Lectura complementaria: Hebreos 10
Para pensar:
- ¿Quién es Dios/qué hace en mi vida?
- Pecado a confesar o evitar
- Actitud a mantener, cambiar o mejorar
- Mandato a obedecer
- Promesa para reclamar
- Ejemplo digno de imitar o evitar
- ¿QUÉ ME DICE DIOS?
- ¿Qué le respondo?
Éste y todos los mensajes publicados han sido tomados con permiso del cuadernillo devocional TIEMPO A SOLAS CON DIOS escrito por el pastor Marcos Manrique de la iglesia CBI Medellín, para más información clic aquí
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