De Jehová es la tierra y su plenitud; el mundo, y los que en él habitan. Salmo 24:1.
¿Tienes problemas con el dar a Dios lo que demanda en su Palabra? ¿Objetas con argumentos muy religiosos o espirituales cuando de entregar el diezmo se trata? ¿Piensas que en este tiempo toda la economía que se demandaba en el Antiguo Pacto ya no está vi-gente para la iglesia? Puedes tener un montón de objeciones para no someterte a la economía de Dios y creer que a través del buen uso de ella tu vida puede ser transformada de una manera significativa.
El problema no está en si dar o no, sino en quién es el dueño de aquello que recibes mes a mes en forma de dinero. Si el propietario de lo que tienes eres tu Dios no tiene nada que hacer. Le darás a Él aquello que consideras quieres entregarle, pero si el título de propiedad de tus bienes lo tiene Dios y tú lo aceptas así todo cambia, y tu economía florecerá de una manera inimaginable porque sencilla-mente estás activando a tu favor los principios y leyes del Reino en la economía de Dios.
Leer: Génesis 2
Lectura complementaria: Salmo 75
Para pensar:
Lectura complementaria: Salmo 75
Para pensar:
- ¿Quién es Dios/qué hace en mi vida?
- ¿Qué dice de mi como creyente?
- Pecado a confesar o evitar
- Actitud a mantener, cambiar o mejorar
- Mandato a obedecer
- Promesa para reclamar
- Ejemplo digno de imitar o evitar
- ¿QUÉ ME DICE DIOS?
- ¿Qué le respondo?
Éste y todos los mensajes publicados han sido tomados con permiso del cuadernillo devocional TIEMPO A SOLAS CON DIOS escrito por el pastor Marcos Manrique de la iglesia CBI Medellín, para más información clic aquí
Las ilustraciones de nuestros mensajes pertenecen a sus respectivos autores.