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sábado, 20 de abril de 2019

La bendición de Dios


La bendición del Señor enriquece a una persona y él no añade ninguna tristeza. Pr. 10:22. NTV.

Bendecir es hablar bien de alguien, entonces cuando el proverbista Salomón dice que la bendición de Dios es la que puede enriquecer, nos da a entender que sin una declaración a favor tuyo de parte de
Dios nadie puede pretender generar unos ingresos que superen más allá de sus propias expectativas, que hasta generan riqueza material.

En la Economía de Dios Su bendición es vital para alcanzar metas económicas. Por eso cuando Dios pide que le diezmemos es para otorgarnos derecho legal en el mundo espiritual para pedir y declarar
en lo financiero sin necesidad de estar rogando, sino usando la autoridad legal para declarar aquello que deseamos ver, porque al diezmar se activa el derecho legal en los cielos que obra a nuestro favor para pedir sin límite y sin temor. Descubrir esto abre los ojos del entendimiento espiritual en la vida del creyente y cambia sus finanzas inmediatamente.
Leer: Gé 17
Lectura complementaria: Sl 90

Para pensar:
  • ¿Quién es Dios/qué hace en mi vida?
  • ¿Qué dice de mi como creyente?
  • Pecado a confesar o evitar
  • Actitud a mantener, cambiar o mejorar
  • Mandato a obedecer
  • Promesa para reclamar
  • Ejemplo digno de imitar o evitar
  • ¿QUÉ ME DICE DIOS?
  • ¿Qué le respondo?


Éste y todos los mensajes publicados han sido tomados con permiso del cuadernillo devocional TIEMPO A SOLAS CON DIOS escrito por el pastor Marcos Manrique de la iglesia CBI Medellín, para más información clic aquí

Las ilustraciones de nuestros mensajes pertenecen a sus respectivos autores.