La historia bíblica cuenta de una mujer viuda cuyo marido había hecho parte del equipo de profetas que andaba con Eliseo. Ella estaba a punto de perder a sus dos hijos por causa de una deuda que su marido adquirió cuando vivía y no fue capaz de pagarla, dejando ese compromiso en cabeza de su
mujer. Ella viéndose en un vacío económico y emocional acude al profeta de Dios para ver de qué manera puede salvar la vida de sus dos hijos y librarse del poder de sus acreedores.
La pregunta del profeta fue: “¿Qué tienes en casa?” Ella respondió: “Un poco de aceite en una vasija”. Su instrucción fue: “Consigue vasijas vacías, muchas vasijas y llénalas de aceite, cuando no haya más vasijas, entonces, vende el aceite, paga tu deuda y vive con lo que quede.” Ella hizo tal
como Eliseo le dijo y su vida cambió de forma radical. Una instrucción profética tiene mayor poder que cualquier curso de economía o administración de empresas o magister en finanzas para salir de deudas.
Leer: Proverbios 3
Lectura complementaria: Proverbios 4
Para pensar:
Lectura complementaria: Proverbios 4
Para pensar:
- ¿Quién es Dios/qué hace en mi vida?
- ¿Qué dice de mi como creyente?
- Pecado a confesar o evitar
- Actitud a mantener, cambiar o mejorar
- Mandato a obedecer
- Promesa para reclamar
- Ejemplo digno de imitar o evitar
- ¿QUÉ ME DICE DIOS?
- ¿Qué le respondo?
Éste y todos los mensajes publicados han sido tomados con permiso del cuadernillo devocional TIEMPO A SOLAS CON DIOS escrito por el pastor Marcos Manrique de la iglesia CBI Medellín, para más información clic aquí
Las ilustraciones de nuestros mensajes pertenecen a sus respectivos autores.