Las palabras más sabias y necesarias que alguien que se ha encontrado con Jesús puede escuchar de Él son: “Porque es necesario que el que adore a Dios lo adore en espíritu y en verdad”. Juan 4:24.
“Es necesario” implica que sin conocimiento correcto tendremos una adoración imperfecta y a la medida nuestra, y no a la demanda de Dios. Lo que más mata a la iglesia de Cristo es la falta de un discipulado que lleve al nacido de nuevo a conocer al Dios verdadero y a través de una relación
genuina, cercana y llena de amor profundo.
El discipulado a la manera de Jesús es lo que produce discípulos que llevan las marcas de Cristo sobre su corazón.
No es mera doctrina, es la verdad que lleva a avivar el espíritu del hombre para entregarle su mejor adoración. Eso es discipular creyentes que pueden ser como Su Señor en cualquier lugar de la tierra.
Leer: Efesios 3
Lectura complementaria: Efesios 4
Para pensar:
- ¿Quién es Dios/qué hace en mi vida?
- ¿Qué dice de mi como creyente?
- Pecado a confesar o evitar
- Actitud a mantener, cambiar o mejorar
- Mandato a obedecer
- Promesa para reclamar
- Ejemplo digno de imitar o evitar
- ¿Qué me dice Dios?