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Cuando Salomón se refiere a guardar el corazón, él realmente quiere decir la esencia de una persona, los pensamientos, sentimientos, deseos, voluntad y decisiones que hacen lo que una persona es. La Biblia nos dice que nuestros pensamientos a menudo determinan lo que llegamos a ser. (Proverbios 23:6).
Dios nos demanda vivir una vida coherente con la nueva vida que recibimos por el sacrificio de Cristo, quien con su sangre nos santificó y nos justificó delante del Padre. "Aparta de ti la perversidad de la boca, aleja de ti la iniquidad de los labios. Tus ojos miren lo recto, y diiríjanse tus parpados hacia lo que tienes delante. Examina la senda de tus pies, y todos tus caminos sean rectos". (Proverbios 4:24 - 26). Éstos siguen siendo los consejos sabios de Salomón para guardar nuestro corazón. Es en la mente donde se levantan las grandes batallas del mal en nuestro interior. Si logramos derribar estos argumentos con la Palabra, venceremos en todo y seremos bendecidos con abundancia.
Leer: Deuteronomio 1
Lectura complementaria: Números 1
Para pensar:
- ¿Quién es Dios/qué hace en mi vida?
- ¿Qué dice de mi como creyente?
- Pecado a confesar o evitar
- Actitud a mantener, cambiar o mejorar
- Mandato a obedecer
- Promesa para reclamar
- Ejemplo digno de imitar o evitar
- ¿Qué me dice Dios?
Éste y todos los mensajes publicados en éste blog han sido tomados con permiso del cuadernillo devocional TIEMPO A SOLAS CON DIOS escrito por el pastor Marcos Manrique de la iglesia CBI Medellín, para más información clic aquí
