«1 Cuando alguien me presente cereales como ofrenda, deberá traer harina de la mejor calidad. Sobre la harina se derramará aceite, y se le pondrá también un poco de incienso; 2 luego se le entregará a los sacerdotes. Ellos tomarán un puñado de la harina con aceite, y todo el incienso, y lo quemarán sobre el altar, para que ustedes se acuerden de que yo les doy todas las cosas. Se trata de una ofrenda de aroma agradable, que se presenta en mi honor. Levítico 2:1 - 2, RV60.
Levítico es el libro donde más se manifiesta la gracia de Dios para con Su pueblo pecador, Israel. Entender los principios de la gracia de Dios por medio de la lectura y estudio de este libro es importante para asociarlo porqué el autor de la Carta a los Hebreos lo compara con la fe firme de todo aquel que quiera seguir a Jesús como la ofrenda única y definitiva para el perdón total de todos sus pecados para así acercarnos confiadamente a Él creyendo que con Su sacrificio en la cruz perdonó todas nuestras trasgresiones, reconciliándonos con el Dios a quien habíamos ofendido con nuestro pecado.
Los primeros siete capítulos de Levítico describe las distintas ofrendas que Dios aceptaba para que Israel se acercara a Él con un corazón arrepentido y así recibir el perdón de sus pecados. Año tras año esto era un ritual conocido como el Yomkippur, o el día de la expiación de la culpa. Entre todas esas ofrendas encontramos una muy importante, y es la primera que se describe en este libro: la ofrenda de acción de gracias a Dios por todos los beneficios recibidos durante el año. El propósito de la misma era que el pueblo recordara que todo cuanto tenían lo habían recibido de Jehová Su Dios. Desde la salida de Egipto hasta la conquista de la tierra prometida todo lo que habían obtenido era un regalo de Su Dios, por eso se hizo necesario que el pueblo anualmente pudiese darle gracias a Su Dios por todo el bien recibido de Sus manos. Esto es muy interesante, porque muchas veces nos presentamos delante del Altar de Dios en estos días con las manos vacías, menospreciando la oportunidad de darle gracias con una parte de lo recibido de sus manos. Esa actitud Dios la llama ingratitud y para Él es una deshonra a Su nombre, la cual debemos evitar caer a toda costa.
T.A.S.C.D.
EZEQUIEL 12; SALMOS 135
Toma un cuaderno y responde las siguientes preguntas inductivas:
¿Quién es Dios en el pasaje que escogiste?
¿Qué te enseña acerca de Él o de ti?
¿Qué pecado te muestra que debes confesar?
¿Qué actitud te muestra que debes corregir o mantener?
¿Qué mandato o precepto debes obedecer?
¿Qué promesa debes reclamar y por qué?
¿Qué ejemplo debes seguir, o por el contrario, debes evitar?
¿Qué te dijo Dios. Cómo escuchaste Su voz en este pasaje?
¿Cómo responderás a Dios por lo que te habló hoy?
Recuerda leer el capítulo y escoger la porción de la Escritura en donde meditarás
EZEQUIEL 12; SALMOS 135
Toma un cuaderno y responde las siguientes preguntas inductivas:
¿Quién es Dios en el pasaje que escogiste?
¿Qué te enseña acerca de Él o de ti?
¿Qué pecado te muestra que debes confesar?
¿Qué actitud te muestra que debes corregir o mantener?
¿Qué mandato o precepto debes obedecer?
¿Qué promesa debes reclamar y por qué?
¿Qué ejemplo debes seguir, o por el contrario, debes evitar?
¿Qué te dijo Dios. Cómo escuchaste Su voz en este pasaje?
¿Cómo responderás a Dios por lo que te habló hoy?
Recuerda leer el capítulo y escoger la porción de la Escritura en donde meditarás