13 Hermanos, yo mismo no pretendo haberlo ya alcanzado; pero una cosa hago: olvidando ciertamente lo que queda atrás, y extendiéndome a lo que está delante, 14 prosigo a la meta...Filipenses 3:13 - 14a. RV60.
Nadie puede alcanzar un propósito de Dios teniendo como presente un pasado sin olvidar o trayéndolo permanentemente a su hoy. Tristemente, así vive mucho creyente. En la iglesia del Señor hay centenares de cristianos que no se han apropiado de la obra de Cristo en la cruz, la cual es favor de ellos. Cuando el Señor iba a expirar y entregar su vida al Padre sus últimas palabras fueron: “consumado es”. Padre, todo de aquello que tú acusabas a tus escogidos ya es tiempo pasado porque Yo tu Hijo he pagado el precio que demandaba la ofensa que contra ti el mundo había ejecutado en el jardín del Edén.
Por esta razón este mes comenzamos diciéndoles que una mente renovada o transformada partía de un corazón genuinamente convertido a Cristo, una metanoia. Si te apropias de la verdad central de la cruz y lo que allí ocurrió, el siguiente paso en tu vida es dar inicio a la transformación de todos tus pensamientos por el único medio posible, la Palabra de Dios. Ella es el agua de vida que limpia todo lo que está sucio, y es el pan de vida del cual al comer saciamos nuestra verdadera y única hambre, la de la sed de justicia. Todo el que ha recibido por medio de Cristo salvación tiene garantía de vida eterna, pero mientras llega a su tierra prometida, el cielo, debe vivir en victoria, aún en medio de pruebas. Esto es posible cuando caminamos mirando hacia adelante y olvidando lo que queda atrás; recordando la promesa del Señor que dijo que nadie puede arrebatarle sus ovejas, porque so Suyas, le pertenecen.
T.A.S.C.D.
Nehemías 1 - 2
Toma un cuaderno y responde las siguientes preguntas inductivas:
¿Quién es Dios en el pasaje que escogiste?
¿Qué te enseña acerca de Él o de ti?
¿Qué pecado te muestra que debes confesar?
¿Qué actitud te muestra que debes corregir o mantener?
¿Qué mandato o precepto debes obedecer?
¿Qué promesa debes reclamar y por qué?
¿Qué ejemplo debes seguir, o por el contrario, debes evitar?
¿Qué te dijo Dios. Cómo escuchaste Su voz en este pasaje?
¿Cómo responderás a Dios por lo que te habló hoy?
Recuerda leer el capítulo y escoger la porción de la Escritura en donde meditarás
Nehemías 1 - 2
Toma un cuaderno y responde las siguientes preguntas inductivas:
¿Quién es Dios en el pasaje que escogiste?
¿Qué te enseña acerca de Él o de ti?
¿Qué pecado te muestra que debes confesar?
¿Qué actitud te muestra que debes corregir o mantener?
¿Qué mandato o precepto debes obedecer?
¿Qué promesa debes reclamar y por qué?
¿Qué ejemplo debes seguir, o por el contrario, debes evitar?
¿Qué te dijo Dios. Cómo escuchaste Su voz en este pasaje?
¿Cómo responderás a Dios por lo que te habló hoy?
Recuerda leer el capítulo y escoger la porción de la Escritura en donde meditarás