...porque esperaba la ciudad que tiene fundamentos, cuyo arquitecto y constructor es Dios. Hebreos 11:10 (RV60).
Otro de los aspectos de la fe de Abraham, según el escritor de la carta a los Hebreos, es la seguridad de que había una tierra mejor, más segura, que sería la verdadera Canaán, la cual esperó fervientemente. No sabría decir con exactitud cuánto tiempo puede durar un ser humano creyendo una promesa y esperando su cumplimiento. Abraham tuvo que esperar mucho tiempo. Primero en recibir la promesa de un heredero. Fueron 25 años de espera para recibir a Isaac. Luego la promesa de una nación grande que saldría de sus lomos. Para ello Dios le cambió el nombre de Abram y le colocó uno nuevo: Abraham. El primero significaba padre enaltecido, el segundo, padre de multitudes.
¿Qué ciudad podía esperar Abraham? Creo que la Jerusalén celestial. La que Dios mismo levantará al final de los tiempos y en la cual Él reinará eternamente en medio de toda la iglesia que lo adora y le honra. Esa es la Jerusalén que por medio de la fe pudo ver Abraham. Esa es la Canaán celestial, la cual será el verdadero reposo de Su pueblo. Pero hay una mejor noticia para nosotros, quienes hemos creído en el autor y consumador de la fe, en Cristo, reconocemos que Él es nuestra patria celestial, la que Abraham y muchos hombres y mujeres de fe esperaban y no vieron, para que nosotros la pudiéramos verla y entrar en ella. Abraham es nuestro padre de la fe, él creyó sin ver lo prometido.
T.A.S.C.D.
Job 29:1 - 31:40
Toma un cuaderno y responde las siguientes preguntas inductivas:
¿Quién es Dios en el pasaje que escogiste?
¿Qué te enseña acerca de Él o de ti?
¿Qué pecado te muestra que debes confesar?
¿Qué actitud te muestra que debes corregir o mantener?
¿Qué mandato o precepto debes obedecer?
¿Qué promesa debes reclamar y por qué?
¿Qué ejemplo debes seguir, o por el contrario, debes evitar?
¿Qué te dijo Dios. Cómo escuchaste Su voz en este pasaje?
¿Cómo responderás a Dios por lo que te habló hoy?
Recuerda leer el capítulo y escoger la porción de la Escritura en donde meditarás
Job 29:1 - 31:40
Toma un cuaderno y responde las siguientes preguntas inductivas:
¿Quién es Dios en el pasaje que escogiste?
¿Qué te enseña acerca de Él o de ti?
¿Qué pecado te muestra que debes confesar?
¿Qué actitud te muestra que debes corregir o mantener?
¿Qué mandato o precepto debes obedecer?
¿Qué promesa debes reclamar y por qué?
¿Qué ejemplo debes seguir, o por el contrario, debes evitar?
¿Qué te dijo Dios. Cómo escuchaste Su voz en este pasaje?
¿Cómo responderás a Dios por lo que te habló hoy?
Recuerda leer el capítulo y escoger la porción de la Escritura en donde meditarás