No seas sabio en tu propia opinión; teme a Jehová, y apártate del mal. Proverbios 3:7.
¿Alguna vez has cuestionado a Dios cuando te ha dicho o demandado algo por medio de Su Palabra y no lo entiendes? A mí en lo personal me ocurre muchas veces. Pero cuando esto pasa prefiero obedecerlo antes que interrogarlo, porque que al final de cuentas sé que lo que dice tiene más sentido que mis razonamientos o interpretaciones.
Cuando se trata del tema sobre la economía de Dios ocurre con mucha frecuencia que buscamos a personas que no son las más fieles ni le obedecen en este tema, aunque de labios dicen hacerlo. Lo predican pero no lo practican. En mis 24 años de vida cristiana he logrado comprender que es más inteligente obedecer las demandas que Dios me impone que interpretarlo, porque al obedecerlo me expongo a recibir miles de bendiciones. Si temo a Dios en lo económico como lo hago en lo demás estoy muy próximo a vivir una vida tranquila, en paz y con abundancia y eso es de por sí mucho pedir. No pretendas seguir viviendo en tu propia opinión, no te irá bien y puedes fracasar.
Leer: Gé 5
Lectura complementaria: Sl 78
Para pensar:
Lectura complementaria: Sl 78
Para pensar:
- ¿Quién es Dios/qué hace en mi vida?
- ¿Qué dice de mi como creyente?
- Pecado a confesar o evitar
- Actitud a mantener, cambiar o mejorar
- Mandato a obedecer
- Promesa para reclamar
- Ejemplo digno de imitar o evitar
- ¿QUÉ ME DICE DIOS?
- ¿Qué le respondo?
Éste y todos los mensajes publicados han sido tomados con permiso del cuadernillo devocional TIEMPO A SOLAS CON DIOS escrito por el pastor Marcos Manrique de la iglesia CBI Medellín, para más información clic aquí
Las ilustraciones de nuestros mensajes pertenecen a sus respectivos autores.