Observe que las mismas palabras de Génesis 1:28 son las que Dios le dice a Noé después de haberle levantado un altar de adoración y puesto allí animales limpios para ofrecerlos en holocausto para su Dios. Fructificar, multiplicarse, llenad la tierra y el tener autoridad sobre los animales y las plantas
es la unción de gobernar que ahora obtiene de Dios Noé y su familia. La autoridad no es algo
que los hijos de Dios nos ganamos, sino es algo que ha sido instituido por Dios porque todo en el Reino de los cielos está sujeto al poder que tiene la autoridad. Dios concede y delega su autoridad al hombre justo que sabe gobernar bien y con sabiduría todos sus asuntos, y más si éstos son de Dios.
Noé y sus hijos son portadores de la autoridad de Dios como la tendría una persona de gobierno. Los hombres y mujeres que llegamos a Cristo retomamos la autoridad que un día Adán perdió en el Edén cuando pecó contra Dios. Eso nos hace hijos de Dios con gobierno, con unción de reyes y sacerdotes en nuestra relación con Dios y con el mundo.
Leer: Proverbios 21
Lectura complementaria: Proverbios 22
Para pensar:
Lectura complementaria: Proverbios 22
Para pensar:
- ¿Quién es Dios/qué hace en mi vida?
- ¿Qué dice de mi como creyente?
- Pecado a confesar o evitar
- Actitud a mantener, cambiar o mejorar
- Mandato a obedecer
- Promesa para reclamar
- Ejemplo digno de imitar o evitar
- ¿QUÉ ME DICE DIOS?
- ¿Qué le respondo?
Éste y todos los mensajes publicados han sido tomados con permiso del cuadernillo devocional TIEMPO A SOLAS CON DIOS escrito por el pastor Marcos Manrique de la iglesia CBI Medellín, para más información clic aquí
Las ilustraciones de nuestros mensajes pertenecen a sus respectivos autores.