Creo que ninguno de nosotros podemos explicarnos o comprender como un hombre fiel, bueno, adorador de la presencia de Dios y que mantenía un temor del Señor en lo profundo de su ser, en un solo día experimentó perdida y dolor tan grande.
Los dos primeros capítulos de este sagrado libro nos narra la más espantosa situación de dolor y pérdida de este gran varón de Dios. Familia, riqueza y salud fueron sus perdidas en 24 horas. Agreguemos a eso la pérdida de sueño, de emociones, de amigos, el prestigio que tenía en medio de sus coterráneos. Muchos de nosotros podemos experimentar estás y otras perdidas más; sin embargo, tenemos la misma esperanza de Job, quien dijo con alegría: “Yo sé que mi redentor vive, y me levantará del polvo de la tierra”. Alégrate y llénate de fe en medio de tus pruebas y dolores.
Leer: Génesis 42
Lectura complementaria: Génesis 43
Para pensar:
- ¿Quién es Dios/qué hace en mi vida?
- ¿Qué dice de mi como creyente?
- Pecado a confesar o evitar
- Actitud a mantener, cambiar o mejorar
- Mandato a obedecer
- Promesa para reclamar
- Ejemplo digno de imitar o evitar
- ¿Qué me dice Dios?