El Apóstol Santiago manifiesta en el capítulo tres de su carta que la sabiduría de éste mundo es diabólica porque trabaja para su propio bienestar y no para el bien de todas las personas (v. 17).
El mundo busca fama, poder, autoridad, riqueza, bienestar, viajar por todo el mundo, sacar provecho de quien dé la oportunidad, no usar la ética ni la integridad en las relaciones interpersonales. El dicho es "papaya puesta, papaya partida". Todos esos son antivalores que se practican en el medio silvestre de éste mundo; pero no debe ser así entre los hijos de Dios.
Por eso quien no tiene sabiduría la pide a la fuente correcta: a Dios. Él la da de forma abundante y sin medida. Pero para lograr alcanzarla se requiere pagar un precio: Buscarlo en intimidad y de madrugada. No lo digo yo, lo dice Salomón, el hombre más sabio que ha existido ¿Estás dispuesto a ganar ese don?
Leer: Levítico 22
Lectura complementaria: Levítico 23
Para pensar:
- ¿Quién es Dios/qué hace en mi vida?
- ¿Qué dice de mi como creyente?
- Pecado a confesar o evitar
- Actitud a mantener, cambiar o mejorar
- Mandato a obedecer
- Promesa para reclamar
- Ejemplo digno de imitar o evitar
- ¿Qué me dice Dios?
Éste y todos los mensajes publicados en éste blog han sido tomados con permiso del cuadernillo devocional TIEMPO A SOLAS CON DIOS escrito por el pastor Marcos Manrique de la iglesia CBI Medellín, para más información clic aquí