»11 ...que os ha nacido hoy, en la ciudad de David, un Salvador, que es CRISTO el Señor. 12 Esto os servirá de señal: Hallaréis al niño envuelto en pañales, acostado en un pesebre». Lucas 2:11 - 12. RV60.
Podemos encontrar muchos motivos para tener gratitud con Dios, pero el mayor y más importante de todos esos motivos es que, por medio de Su Hijo Jesús recibimos el regalo de la salvación. Un día como hoy o mañana en cada uno de los países practicantes de la fe cristiana conmemoramos el nacimiento de Jesús el Hijo de Dios. Estamos seguros que el Cristo vivo no nació en una fecha como esta, pero en lo que sí debemos confiar es que en el cumplimiento del tiempo, Dios envió a Su Hijo para salvar aquello que se había perdido, o sea a nosotros. Este evento no solamente es un acontecimiento histórico, si no más bien, es el hecho más trascendente e importante para una humanidad pecadora, alejada de Dios y sin esperanza alguna por causa del pecado que lo separaba de Su gloria. Ese Dios inaccesible, invisible, todopoderoso, conocedor de todo y omnipresente se humilló a sí mismo haciéndose hombre para ser el Emanuel profetizado por el profeta Isaías y vivir en medio de Su pueblo.
Tal vez pueda parecerte una fiesta más o una fecha con un número en rojo que indica que puedes descansar, pero en lo profundo de tu corazón debes reconocer que estamos conmemorando el nacimiento de Aquel que cambió la historia de la humanidad al devolverle la esperanza de poderse reconciliar con Su Dios de quien se encontraba separada por causa de su maldad. Somos salvos por la gracia de Dios y esa promesa cumplida es el gran motivo para decirle al autor de la vida: gracias por haberme salvado de la condenación eterna y hacerme parte de tu preciosa familia.
T.A.S.C.D.
EZEQUIEL 33; Lucas 6
Toma un cuaderno y responde las siguientes preguntas inductivas:
¿Quién es Dios en el pasaje que escogiste?
¿Qué te enseña acerca de Él o de ti?
¿Qué pecado te muestra que debes confesar?
¿Qué actitud te muestra que debes corregir o mantener?
¿Qué mandato o precepto debes obedecer?
¿Qué promesa debes reclamar y por qué?
¿Qué ejemplo debes seguir, o por el contrario, debes evitar?
¿Qué te dijo Dios. Cómo escuchaste Su voz en este pasaje?
¿Cómo responderás a Dios por lo que te habló hoy?
Recuerda leer el capítulo y escoger la porción de la Escritura en donde meditarás
EZEQUIEL 33; Lucas 6
Toma un cuaderno y responde las siguientes preguntas inductivas:
¿Quién es Dios en el pasaje que escogiste?
¿Qué te enseña acerca de Él o de ti?
¿Qué pecado te muestra que debes confesar?
¿Qué actitud te muestra que debes corregir o mantener?
¿Qué mandato o precepto debes obedecer?
¿Qué promesa debes reclamar y por qué?
¿Qué ejemplo debes seguir, o por el contrario, debes evitar?
¿Qué te dijo Dios. Cómo escuchaste Su voz en este pasaje?
¿Cómo responderás a Dios por lo que te habló hoy?
Recuerda leer el capítulo y escoger la porción de la Escritura en donde meditarás