LA MENTE DE DIOS - SEPTIEMBRE 13

Porque mis pensamientos no son vuestros pensamientos, ni mis caminos vuestros caminos, dice el Señor. Isaías 55:8. RV60.

Ignorar que Dios es un ser personal y real es lo que impide a un creyente tener consciencia de que el Espíritu Santo es un ser verdadero, vivo y que es el mismo Dios, quien fue enviado por el Padre y el Hijo para morar dentro de cada discípulo de Jesús a fin de llenarlo totalmente del poder del cielo dentro de cada uno de ellos.  

 
Si reconocemos que el Espíritu Santo es Dios, debemos creer y tener la certeza que Él posee todos los atributos de la deidad, entre ellos, la omnisciencia, que corresponde a su mente infinita, ilimitada, que no piensa limitadamente, como sucede con la mente humana. Recordemos que los pensamientos de Dios no son como los nuestros ni están condicionados por una mente contaminada por el pecado. Por cuanto Dios tiene mente, nosotros, sus seres creados también la poseemos, pero lógico, no de la manera santa e ilimitada como la Suya. Así que Dios piensa como lo hacemos nosotros, pero de una manera infinita, perfecta y bondadosa. Al ser el Espíritu Santo Dios y en Él se encontrarse la omnisciencia divina, la mente plena de Dios. Él tiene conocimiento pleno y anticipado de todo lo que vaya a suceder, aún antes de que ocurra. Nada lo toma por sorpresa porque es el mismo Dios ¿Necesita más prueba para confiar en Él?

Leer: Génesis 49 - 50

Para pensar:

• ¿Quién es Dios/qué hace en mi vida?
• Pecado a confesar o evitar
• Actitud a mantener, cambiar o mejorar
• Mandato a obedecer
• Promesa para reclamar
• Ejemplo digno de imitar o evitar
• ¿QUÉ ME DICE DIOS?
• ¿Qué le respondo?

Éste y todos los mensajes publicados han sido tomados con permiso del cuadernillo devocional TIEMPO A SOLAS CON DIOS escrito por el pastor Marcos Manrique de la iglesia CBI Medellín, para más información clic aquí

Las ilustraciones de nuestros mensajes pertenecen a sus respectivos autores.