Porque os digo que si vuestra justicia no fuere mayor que la de los escribas y fariseos, no entraréis en el reino de los cielos. Mateo 5:20. RV60.
Después de haber expuesto las bienaventuranzas a sus discípulos en el Monte Sion, el Señor hace un epílogo de todas esas sentencias: Ustedes son sal y luz. Dos elementos esenciales en la vida. La sal preserva la vida y la luz la guía el camino y hace retroceder toda tinieblas. Pero todo no queda allí porque ese epílogo es rematado con otra sentencia: Su conducta, su rectitud, su santidad debe ser mayor que la de los escribas y fariseos.
Jesús nos afirma que el verdadero cristianismo no se encuentra en el espíritu de la letra de la Biblia que leemos sino en la santa manera de vivir. No somos cristianos porque hicimos un curso, lo somos porque hemos sido comprados a precio de sangre y ahora hacemos parte de un Reino cuyo valor principal es la santidad practica, aquella que otros pueden ver y seguir porque somos de una sola pieza, somos lo que decimos que somos y no lo que queremos mostrar como lo hacían los fariseos y escribas. Este es un derrotero diferente a cualquier religión del mundo.
Leer: Mateo 19
Lectura complementaria: Mateo 20
Para pensar:
Lectura complementaria: Mateo 20
Para pensar:
- ¿Quién es Dios/qué hace en mi vida?
- Pecado a confesar o evitar
- Actitud a mantener, cambiar o mejorar
- Mandato a obedecer
- Promesa para reclamar
- Ejemplo digno de imitar o evitar
- ¿QUÉ ME DICE DIOS?
- ¿Qué le respondo?
Éste y todos los mensajes publicados han sido tomados con permiso del cuadernillo devocional TIEMPO A SOLAS CON DIOS escrito por el pastor Marcos Manrique de la iglesia CBI Medellín, para más información clic aquí
Las ilustraciones de nuestros mensajes pertenecen a sus respectivos autores.