La segunda etapa del proceso de un sueño se llama: Vender al soñador. Tus detractores, enemigos o los que te persiguen por ser soñador creerán que cuando te vendan todo terminará. Están muy equivocados, porque lo que están haciendo es parte del proceso de Dios para transformarte en una mejor versión de ti mismo en tu identidad de hijo.
Rubén propuso la cisterna para matar a José, pero ésta se encontraba vacía. Judá propuso venderlo a los ismaelitas que pasaban por aquel lugar. La transacción se hizo y por 20 monedas fue vendido el hombre que tenía el sueño de Dios. De ser el hijo amado ahora pasaba a ser esclavo en Egipto. Pero ni aún allá el sueño moriría porque el sueño de Dios no muere, se cumple.
Leer: Job 25
Lectura complementaria: Salmos 56
Para pensar:
Lectura complementaria: Salmos 56
Para pensar:
- ¿Quién es Dios/qué hace en mi vida?
- ¿Qué dice de mi como creyente?
- Pecado a confesar o evitar
- Actitud a mantener, cambiar o mejorar
- Mandato a obedecer
- Promesa para reclamar
- Ejemplo digno de imitar o evitar
- ¿QUÉ ME DICE DIOS?
- ¿Qué le respondo?
Éste y todos los mensajes publicados han sido tomados con permiso del cuadernillo devocional TIEMPO A SOLAS CON DIOS escrito por el pastor Marcos Manrique de la iglesia CBI Medellín, para más información clic aquí
Las ilustraciones de nuestros mensajes pertenecen a sus respectivos autores.