Lo más seguro que puede tener un hijo de Dios, después de su salvación, es el cumplimiento de una palabra profética de parte de Su Padre celestial. El Señor lo dijo así: “Cielo y tierra pasará, pero Mi Palabra no pasará.”
Todo cuanto está escrito en la Biblia tiene un cumplimiento perfecto y seguro en un tiempo determinado por Él. Cuando Dios habla los cielos se mueven a obedecer, y al mismo tiempo le hablan a la tierra para que ésta haga correr esa palabra hasta alcanzar a aquella persona o personas que deben ser objeto de bendición con la palabra emitida desde el trono de Dios. Este será un poderoso mes donde hablaremos del poder que tiene la Palabra Profética de Dios sobre Su iglesia y de todo aquel que decide caminar creyendo que Dios cambia vida y circunstancias.
Leer: Marcos 15
Lectura complementaria: Marcos 16
Para pensar:
- ¿Quién es Dios/qué hace en mi vida?
- ¿Qué dice de mi como creyente?
- Pecado a confesar o evitar
- Actitud a mantener, cambiar o mejorar
- Mandato a obedecer
- Promesa para reclamar
- Ejemplo digno de imitar o evitar
- ¿Qué me dice Dios?
Las ilustraciones de nuestros mensajes pertenecen a sus respectivos autores.