Lo próximo que vas a leer en esta reflexión puede convertirte en una persona espiritualmente contemplativa delante de Dios. Cambió mi vida desde el momento en que lo leí y decidí hacerlo parte de mi ser espiritual y emocional. Consiste en marcar la diferencia entre un tiempo devocional con Dios y mantener una oficina diaria con Él.
¿Locura, revelación, religiosidad…? ¡no sé! Sólo puedo decirte que al identificarte con lo que dijo David en el Salmo 42:1 - 2 tu vida recibe revelación que te transforma. Puedes tener un tiempo con Dios y no experimentar su presencia. Puedes llenar un cuadernillo devocional y Dios no estar allí en donde tu estás. Pero puedes decidir tener una oficina diaria con Él que va más allá de un devocional y tocar su corazón sin necesitar pedirle nada ni esperar nada. Porque la Oficina diaria es la consciencia de Dios en toda parte y a todo momento; pero sobre todo, es decidir parar a varias horas de tu día para adorarlo sin rutina sino como una vivencia del espíritu que te conecta ¡Aleluya!!!!!
Leer: Éxodo 14
Lectura complementaria: Éxodo 15
Para pensar:
- ¿Quién es Dios/qué hace en mi vida?
- ¿Qué dice de mi como creyente?
- Pecado a confesar o evitar
- Actitud a mantener, cambiar o mejorar
- Mandato a obedecer
- Promesa para reclamar
- Ejemplo digno de imitar o evitar
- ¿Qué me dice Dios?